Capitulo 3

aquí os dejo el capitulo 3, siento el retraso, pero examenes y demas. un beso :D

Capitulo 3

-¿Qué… qué quieres decir?- dijo Marcos, un tanto nervioso. Daniel le dio un codazo, asique él se cayó y Daniel empezó a hablar.

-No estábamos en el bosque ayer- dijo muy convencido.

-Claro que sí, os vi hablando con alguien y diciendo algo de que tenía que morir, y que no os enamoraseis y cosas así, justo antes de desmayarme.

-Creo que has tenido un sueño, porque nada de eso paso, será por beber más de la cuenta- dijo Marcos ya más tranquilo.

-Sí puede ser- dije aunque no muy convencida.

-Claro que fue eso, si nosotros ni siquiera fuimos a la fiesta- dijo Daniel.

-Vale, ahora me voy- les dije y me volví a mi mesa.

-¿De qué hablabais? – preguntó Erick mirándoles con cara de asco.

-De nada, solo que ayer me pareció verlos en el fiesta, pero ya está, no te pongas celoso- le dije dándole un beso en la mejilla.

-Es que no me caen bien, y no quiero que  se te acerquen más de la cuenta- dijo pasándome un brazo por el hombro.

-No te preocupes, que yo estoy contigo y con nadie más- nos dimos un beso cálido en los labios.

-Oh, qué bonito es el amor, yo también quiero un novio- dijo Mel.- alguien como tu hermano por ejemplo- dijo señalando a Héctor que venía hacía nosotras seguido de mi hermana.

-Serena dime que no es verdad lo que he oído- dijo haciendo que me levantase.

-No sé qué has oído- le dije haciéndome la tonta.

-Pues dicen que ayer hicisteis otra de esas fiestas en el bosque y te desmayaste por beber más de la cuenta- dijo con mirada furioso.

-Sí, es verdad, pero qué más da ya estoy bien- dije volviéndome a sentar.

-No, que más da no- dijo Adriana.

-Te estás comportando como una niña caprichosa- dijo mi hermano. Dios eso ya era el colmo, me levanté y me puse a gritarle.

-Haber Héctor, que no eres mi padre, que no te me pongas así- le dije ya mientras todo el mundo nos miraba.

-No, pero soy tu hermano- dijo él.

-Me da igual, tú no eres quien para decirme que debo hacer, y no vengas con esto ahora cuando tú has sido el primero que se va de fiesta y cada semana estas con una nueva, asique no me digas nada – le dije. Puede que me estuviese pasando, pero hoy no era un buen día para hablar de buenas conmigo.

-Te vengo con estas, porque soy tu hermano y me preocupo por ti- dijo él más tranquilo.

-Pues no deberías hacerlo, que nadie va a venir a matarme por beber un poco- vi como Marcos bajó la mirada. Me fui corriendo del comedor y deje a todos con la palabra en la boca.

Me fui a mi habitación y estuve llorando mucho rato, no soportaba que me dijesen lo que podía y no podía hacer. Al cabo de un rato alguien llamó a la puerta

-Pasa- dije secándome las lágrimas y sentándome bien en la cama. La puerta se abrió y apareció la directora.

-Hola- dijo.

-Señora directora, que hace aquí- le dije yo.

-He venido a hablar contigo.

-Sobre qué, si es para decirme algo de la fiesta de ayer, lo siento no volverá a ocurrir.

-No es sobre eso, si lo de las fiestas lo sé desde hace tiempo- esbozó una pequeña sonrisa.- veras, antes has dicho algo de que no se tenían que preocupar por ti, que nadie te iba a venir a matar, por beber.- si recordaba esa parte. Asentí con la cabeza, y ella continuó- pues veras, puede que por beber no, pero por otra cosa sí- dijo cogiéndome de la mano.

-¿A qué te refieres?- le pregunté.

-Nada, déjalo, no tenía que haber venido aun no estás preparada, cuando llegue la hora te lo contare- dijo, ya volvía a ser la fría directora de siempre- me voy, y usted debe de bajar a las ultimas clases inmediatamente.- dijo mientras alía por la puerta.

¿Por qué todo el mundo habla de muertes, y de cuando llegue la hora?, es que eran muy estresantes. Decidí no darle importancia, porque seguramente se le fuese la pinza con todo esto de los alumnos nuevos.

Me lave la cara y me puse un poco de polvos, para que no se vea que he llorado y baje a clase, tenía teatros, asique no tendría que hablar con ninguna de mis amigas.

Llegue a tiempo, aun no había venido la profesora, asique mejor. Me puse a hablar con Hugo mientras que esperábamos, cuando llegó la profesora, nos sentamos cada uno en su sitio.

-Bien chicos, vamos a empezar con la obra de primavera- dijo la profesora- va a ser una que seguro que a las chicas os encanta.

Haber que obra nos toca hacer esta vez, la última vez fue la de Cleopatra, y yo fui la protagonista, porque no es por echarme flores ni nada, pero soy la que mejor actúo.

-Vamos a hacer la obra de Grease, y tendremos que cantar de verdad- dijo la profesora. Que bien, esa era una de mis películas preferidas, asique no me importaba hacer la obra- para empezar vamos a hacer la prueba para los personajes- dijo. Yo me presentaría para ser Sandy, no cantaba muy mal, asique podía hacerlo perfectamente. Cuando la profesora estaba apuntando a los que se presentaban para cada papel, entró en la sala Marcos, no me lo creo, él iba a teatro.

-¿Te has apuntado a teatro?

-Sí, es que era la única opción que me gustaba.

-Ah- la verdad es que me apetecía mucho, ya que me llevaba bien con él, además así le podría conocer mejor.

Él se fue a apuntarse en la lista, para actuar como Danny ( el protagonista) todas las chicas le miraban a él y murmuraban acerca de lo guapo que era.

Durante la clase estuvimos haciendo actuaciones para ver quién sería cada personaje, y Valeria se había apuntado también como Sandy.

Al final de la clase la profesora dijo quien sería cada personaje. Yo sería Sandy, y Marcos Danny, a Valeria no le sentó muy bien, pero ella fue Rizzo. Los demás personajes serían las otras personas.

Cuando sonó el timbre me fui a mi próxima clase, la de expresión corporal. En esta clase desplegábamos nuestras alas y practicábamos esgrima mientras volábamos.

-¡Espera!- gritó alguien a nuestra espalda. Me di la vuelta y vi a Marcos que venía hacía donde yo estaba.

-Dime.

-Nada, es que era para acompañarte a tu próxima clase, y además felicitarte por tu papel, la verdad es que parecía que a Valeria no le ha sentado muy bien- dijo riendo. Yo también sonreí.

-Gracias, pero no hace falta que me acompañes, mis clase es aquí fuera.

-No me importa además creo que yo también estoy en esa clase- dijo con una sonrisa.

Fuimos andando a fuera y me encontré con Erick, que al verme con Marcos se le tenso la cara y se dio la vuelta.

-Lo siento, tengo que ir a hablar con Erick.- le dije y me fui corriendo detrás de Erick al bosque que es a donde se había ido- ¡Erick espera!- le grité. Él se paró y me miro parecía desilusionado.